“Se buscan Lupitas” llega a Cozumel: arte, identidad y archivo vivo
Se buscan Lupitas es el proyecto fotográfico del artista japonés Ryuichi Yahagi que este fin de semana llega a Cozumel para sumar nuevas participantes a un archivo visual que lleva más de veinte años en construcción. La iniciativa, presentada por el Museo de la Isla, busca retratar a personas llamadas Guadalupe y registrar, a través de su imagen, la relevancia cultural del nombre en México.
Un archivo que crece desde hace dos décadas
Ryuichi Yahagi nació en Kawasaki en 1967 y vive en Xalapa desde 1995. Desde entonces ha desarrollado una relación estrecha con la cultura mexicana. En este periodo ha fotografiado a más de 850 mujeres y hombres llamados Guadalupe en diversos estados. Su trabajo documenta identidad, tradición y la presencia social del nombre, considerado uno de los más significativos del país. A diferencia de propuestas centradas en la iconografía religiosa, Yahagi dirige su lente a quienes llevan el nombre en la vida diaria.
Sesiones abiertas en Cozumel
La llegada del proyecto a la isla representa una nueva etapa. Por primera vez, el Museo de la Isla facilitará sesiones abiertas con el objetivo de reunir a la mayor cantidad de Lupitas locales. El artista realizará fotografías este fin de semana en los siguientes puntos:
- Museo de la Isla, de 11:00 a 14:00 horas
- Parque Benito Juárez, de 17:00 a 21:00 horas
Yahagi apuntó que espera fotografiar al menos cien personas llamadas Guadalupe durante su estancia en Cozumel. Todas formarán parte de la exposición que se inaugurará el 11 de diciembre a las 20:00 horas en el Museo de la Isla. La muestra permanecerá abierta hasta finales de enero. Al término, cada participante podrá recibir una impresión gratuita de su retrato.
Un puente cultural que sigue creciendo
“Se buscan Lupitas” avanza como una obra abierta que reúne historias y rostros vinculados a uno de los nombres más emblemáticos de México. Para Yahagi, esta búsqueda también funciona como un reconocimiento a la comunidad que lo ha acogido y como una forma de preservar expresiones contemporáneas de identidad.
